Tus besos tienen
algo que me atontan y me inventan otro mundo, contigo todo es inocencia, todo
es nuevo, todo es puro.
Definirte es imposible
siendo tan compleja y tan distinta, conocerte es un reto de mi alma y mi
cuerpo, tus palabras son nuevas en mi diccionario y tu forma de ser es algo teatral
que a veces no me lo creo.
Esta historia
se comenzó a escribir entre nosotros hace años pero el escritor descanso un
buen tiempo para darle matices de película a lo que se creía iba a ser solo un
capitulo de una obra callejera. Por ti en aquel entonces hice de todo y no
funciono, hoy nos reinventamos una oportunidad para sonreír, pensarnos y
extrañarnos, para experimentar cosas nuevas que nuestros cuerpos sienten y el
tuyo necesita.
Y pensar que
me sacas una sonrisa tan solo con escribirte porque eres justamente eso una
sonrisa, una ternura, eres tanto que no encuentro nada por esa forma tan tuya
de creer y de pensar, lo sé, piensas que el amor se manifiesta en necesidades,
piensas que nuestros cuerpos marcaran nuestro futuro, a lo mejor si o a lo
mejor todo queda en deseo y pasión, todo queda en solo eso, algo más que sexo.
Y quien diría
que fui buscando una sonrisa y conseguí tu alegría, tus pensamientos y hasta tu
deseo, yo solo buscaba alguien que de forma natural me levantara el ánimo, ese
que perdí en esos días que ni la salsa me reponía.
Y así fue
como saliste tu tan inocente que solo me quedo callar y decir “buenas tardes”,
fue como ir a la biblioteca y reabrir un libro para terminar de leerlo, ese
libro se llama VIDA y la disfruto bailando en la pista del destino, loco por
seguir inventándome historias nuevas para seguir creciendo como loco y como
hombre.
Eres un barco
de sonrisas que vino a mi anclando tus labios en los míos y en las olas del
futuro pero luego se los llevo la orilla y hoy no estás conmigo…
Una cosa es la
emoción de conocer a alguien tan distinta a nosotros y otra muy distinta
enamorarnos. La emoción puede que dure semanas, el amor toda la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario