viernes, 27 de diciembre de 2019

Nuestra Obra de Arte

Veía en la galería de la vida historias del pasado, sentía alegría de recordar, orgullo de haber aprendido tanto y mientras pasaba por cada cuadro tomaba los colores más vivos y más profundos para guardarlos, fueron pinturas, que fueron enseñando la técnica y la manera perfecta para crear, para vivir, para pintar.

Tiempo después en la soledad de mi rincón recibí una llamada, una de esas invitaciones que llegan pocas veces al año, en ese afán de salir de mi adicción por el trabajo me tomé unas horas para mí y asistí.

Tu sonrisa, tu mirada distraída hacia atrás cuando te tomé por el cuello para saludarte, ese día jamás pensé que por atrevido y soñador te convertirias en lo mejor que me pasó en mucho tiempo.

Tomaste el pincel y lo primero que hiciste fue cambiar en mi alma el vacío por la forma de tus labios, así con tu actitud de guerrera, con ese carácter que amo aceptando el reto de una locura con sentido, que será el lienzo perfecto para ir diluyendo cada problema que pase tomados de las manos dándole matices a nuestra vida con los relieves y colores que nos gustan.

Este tiempo ha servido para pensar, para soñar, pero también para aceptar que dejándonos llevar, cada paisaje será perfecto porque lo estaremos pintando entre los dos, tu explosiva, yo calmado para ser tu estabilidad, yo impaciente y tú fuerte para ayudarme a acelerar poco a poco, a tu ritmo porque mi equilibrio eres tú, teniendo siempre el pincel en la mano para seguir creando esto abstracto que solo tú y yo entendemos cuando nos ven de lejos y parecemos angeles cuando en verdad somos demonios.

Vas mezclando en la paleta de colores nuestro destino, tu soñando y yo trabajando para ayudarte a cumplir tus sueños, tu siendo mía y yo pensandote cada segundo de mi vida, creciendo como un todo, luchando por los nuestros quienes son la principal razón para no dejar de crear ni de creer.

Los colores más vivos y profundos son los últimos que me quedan, son para pintarte las ganas haciéndote mía y la sonrisa a diario para no dejar de sorprenderte ni atenderte como te mereces cada día de mi vida. Hablemos siempre, entendamos cada situación y sigamos contagiando al mundo con lo que sentimos.

Yo te quiero así como eres, con tus defectos que para mí son perfectos y con tus virtudes que están llenas de sueños y de futuro.

Sigamos con fuerza, mezclando nuestros colores, dándole aún más sentido a esta vida, que me hizo entender tantos años después que me trajo hasta aquí, con la experiencia, la alegría y la creatividad perfecta para que juntos hagamos Nuestra Obra de Arte.

.-JJ