domingo, 3 de julio de 2016

Una vida, un amor, un final.

No somos normales, así nos amamos, no somos perfectos, así nos gustamos, a veces hasta nos tropezamos, pero hasta eso nos lleva a la cama y cuando llegamos ahí, no hay nada que decir.

Eres exactamente lo que soñaba, con más defectos pero tambien con más virtudes, eres lo que me faltaba para sentirme perfecto, lo que necesito siempre para sentirme vivo.

El tiempo juega en contra quizás, pero decidí no preocuparme por eso y enfocarme en convertir en tatuaje la huella que dejé en tu cuerpo desde el primer día que te hice mía. La verdad es que lo dejo todo en manos de Dios, el sabe cuanto te amo y cuanto te merezco, también sabe cuanto me amas y cuanto te haré feliz si al final de la historia estamos unidos de la única forma que nos falta, ante el mundo.

Parece que nacimos para sufrir cada gramo de felicidad pero eso nos hace grandes, porque si que hemos luchado para sentir lo que hoy nos une, eso que nunca dejó de pasar en nuestras cabezas y en nuestros corazones.

Siempre queremos más tiempo para estar juntos, a veces se nos hace corto, queremos más y más, y eso nos pasa porque somos todo, somos amor, pasión y locura, somos alegría, ternura y respeto, somos detalles, cariños y gestos, nos sentimos completos, perfectos y plenos.

Nunca nada será tan bueno como estar juntos y no habrá algún reto tan grande.

Por eso sí algún día estamos lejos y el final de la historia no fue como lo soñé,
Me quedará la satisfacción de que estés donde estés sabrás que fuimos...

El amor verdadero.

Aquel amor perfecto...

.-JJ