martes, 31 de enero de 2012

Amor Vs Metas, quien vence es real...

Cada noche que pasa me pregunto si fue ella o fui yo el que hizo de esta historia interminable, su debilidad mi alegría, mi debilidad sus ojos, mi pesadilla no tenerla, mi sueno verla feliz, su vida verme triunfar y su frustracion no tenerme jamas. Hay experiencias que suelen ser como las calles, una mas ancha o larga que otra, pero al final de la calle siempre te consigues lo mejor que nunca imaginaste o quizá la peor mierda, pero pasa y sea bueno o malo deja una huella, esa Sra respetable llamada experiencia. Un día pensé con inocencia  que hubiera pasado si hubiese elegido al flaco y no a Europa? muy inocente, siempre se trago el decirme que me adoraba para no hacer caer un sueno, sabia que si la besaba todo podría irse al piso, sabia que si me miraba a los ojos pa decirme cuantos celos le daba verme con otra se lo creería, pero ahí esta con su sueno y sin mi, feliz a su manera aunque no conforme, ni muy feliz tampoco porque cuando bese a otro solo pensara que hubiese sido de nuestro beso que aunque pueblerino y no de alcurnia lo soñó, lo pensó, lo imagino y lo quiso hacer pero puso mas su ambición que su corazón y ahora a lo mejor puedan mas las ganas que otra cosa, mientras le dure                  Gano lo que siempre fue verdad, sus ganas de triunfar y no su amor porque ese nunca existió...                                                                                                                                                                            Por eso decidí darme permiso de sentir otra vez......

lunes, 30 de enero de 2012

Amor de calle parte 1

Ayer la vi, su sonrisa atontada, su torpe caminar, sus ojos azul cielo, esa maldita timidez que no la hizo mía aun sigue en su sangre, aun sigue en su alma. Me dijo en un segundo tantas cosas que no podría decirlas en un minuto tartamudo, pero delato su corazón al decirme que nada cambiara nuestro destino, lo que es para uno vendrá y si tiene que esperar postiza la vida o postizo el cuerpo de una vejez abrumadora, ella sabrá que sera el momento indicado. Me dijo que siempre estará ahí para mi, para mis labios, para mis canciones de idiota prepotente que insinúan ser tanto cuando no soy nadie, para mis locuras, alegrías y tristezas pero que estará ahí, que aunque entre en mil corazones y bese un millón de labios ella sabe que es para mi.                                                                                     Y pensar que todo eso lo dijo sin hablar, tan solo con una puta lágrima...