Un día la vida decidió que te sintiera como mi hermana, y fue desde el primer día con aquella sonrisa como diciendo hola soy yo jejejeje fue a través de una ventana y desde entonces te convertiste en mi princesa.
Mi princesa de la boca de fresa, mi futbolista, la niña que ya es mujer con la sonrisa tierna y un corazón puro lleno de alegría, esa que siempre extraño por ser genuina y esa que en una sonrisa o en una mirada sabe hacerme saber lo que piensa.
La vida es así, cuando creíamos que estaríamos cerca tú haciendo tu vida siendo feliz y creciendo y yo intentando apoyar cada sueño que tengas y que sigas siendo para siempre una buena mujer, haciéndote la mejor en algo para salir adelante y siempre sabiendo que cuentas en mí con un hermano que siempre estaría pendiente de que todo vaya bien.
Pero no fue así, y es una de las cosas que lamento, pero sé que la gente que sabe lo importante que eres para mí estará pendiente de ti y te ayudará a que tomes las mejores decisiones en el camino.
Nane, más adelante cuando seas grande, cuando tengas tu independencia o tu familia espero que sepas que cuentas con aquel hermano que la vida te regaló que aunque no esté cerca ni presente con una llamada o con una mirada sabrá qué hacer y estará siempre, pero déjate llevar por tu corazón y por la gente que te quiere y te cuida que seguramente lo que ellos piensan yo también lo pensaré.
Quédate cerca de ellos, haz tu vida aquí que estarás más segura y más feliz, cumple con tus etapas, conoce gente y conoce la vida, intenta prepararte en algo que quieras descubrir para ejercerlo y sumar experiencia y trabajo.
No te quedes encerrada para siempre pero tampoco te vayas lejos, tu lugar estará siempre cerca de los que te aman y cerca de tu mamá, habla más con ella, confía en ella, hazte fuerte de cabeza que de seguro eso te convertirá en una mujer con templanza y seguridad.
Aquí llevo conmigo ese regalo que me hiciste, ese ocaso y ese sol tan bonito, siempre que gane nuestro Madrid siente mi abrazo y cuando toque perder quiero que sepas que ya estaré deseando ganar para saber que te abrazo en la distancia.
Ponte tú uniforme de fútbol, y con tu pelo Perfecto y elegante anda a jugar a la pelota y cuando metas un gol quiero que sepas que como cuando tengas una familia y seas esa mujer imponente y dedicada a su trabajo y a su hogar yo estaré súper orgulloso de ti.
Cuídate, sé feliz pero sobre todo nunca olvides que siempre estaré para ti.
Para mi princesa futbolista.
Jose.