De Marzo a Junio fueron probablemente los peores días de mi vida, pero con lección aprendida incluida, no importa que tan grande sea el amor de tu vida, pero si ese amor representa un problema para ti, debes renunciar a él.
Se suponía que era al fin mi puta historia de amor, pero no, solo fue una despedida que duro tres días de amor y felicidad plena, en donde al fin fuimos felices sin medir nada, sin escondernos de nadie y sabiendo que teníamos una playa para nosotros solos, fui el hombre más feliz del mundo y era tal la felicidad que algo me decía que era el final, y la verdad si soy sincero debió quedar hasta ese tercer día, despedirnos en la cama, después un beso en la frente un abrazo y quedar bien para toda la vida.
Pero no fue así, y pasó lo que pasó.
Nunca voy a olvidar como corriste hacia mi cuando llegaste al aeropuerto, como te tirabas encima de mí para tomarte fotos besándome, los videos que grababas sin darme cuenta acariciándome o abrazándome; caminar contigo de la mano como si estuviéramos del otro lado del mundo, como si estos años no hubieran pasado, emborracharnos juntos y que me apretabas con las uñas para recordarme que me amabas, pero lo que jamás voy a olvidar y se queda para siempre en nuestra historia fue nuestra primera noche durmiendo juntos, abrazados como si no hubiera un mañana, apretados como si fuera la última vez, y claro ese momento mágico del video brindando que nos grabaron, nunca te había visto sonreír así y se notaba en nuestras caras que éramos las dos personas más felices del universo.
El amor cuando es real se nota en la mirada y eras la mujer más enamorada que nunca vi, te veía y no me lo creía, caminabas por la playa y te tomaba muchas fotos admirándote toda, disfrutaba verte caminar, sonreír y posar, me sentía poderoso solo por tomarte la mano o hacerte una foto que sabía que posabas solo para mí, esa sensación rica llena de amor y de sentido de pertencia que siempre sentí cuando estaba contigo porque hasta ese día habían pasado cinco años y todavía te sentía mía.
Nos quedamos con las ganas de hacer una familia, de la foto en el Bernabéu con nuestra Hija, de los fines de semana familiares y de tener en nuestra casa a nuestra futbolista, de cuidar a nuestras dos princesas y sonreír con ellas cada día de nuestra vidas, nos quedamos con las ganas de hacer algo grande, pero lo más grande que tuvimos para siempre pase lo que pase será NUESTRO AMOR, tan perfecto como toxico y tan imposible como intenso.
Nunca hice tanto por nadie, y nunca te enamoraste tanto como de mí, pero los dos perdimos algo, tú perdiste al amor de tu vida, a la única persona que te soportaría en la vida y yo perdí entre tantas cosas a la mujer que significó lo mejor y lo peor al mismo tiempo.
La vida nos hizo esta putada mi amor, pero ya no hay vuelta atrás, toca seguir, toca luchar que si lo haces sin dañar a nadie puede salir bien.
Como dice la canción, que loco que por poco, casi tú te quedas, casi para siempre.
Adiós para Siempre.
.- Jose Jesus.